Una de las principales razones que motivan la visita de Asturias es, indudablemente, su paisaje y belleza natural. Mar, montaña, bosques y valles en un territorio relativamente pequeño. Si existe un lugar que sintetiza en una sola imagen la espectacularidad del paisaje asturiano ese es, sin duda, el Mirador del Fitu. No es casualidad que haya sido seleccionado en numerosas ocasiones entre los mas bellos miradores de España.
Inaugurado en 1927, esta plataforma de hormigón se encuentra suspendida sobre el suelo unida tan sólo a la montaña por una escalera que le sirve de sustento. Desde la parte superior, el mirador del Fitu ofrece una panorámica de 360 grados imponente que, en días claros, llega desde la costa de Ribadesella hasta las altas cumbres de los Picos de Europa, Redes o Ponga. La Cordillera y el mar Cantábrico a los pies de esta atalaya emblemática a la que se puede acceder fácilmente en coche por la carretera AS -260 desde Arriondas o desde la costa por Caravia y Colunga.
Puerta de entrada a la Sierra del Sueve
Si la vista del mirador del Fitu ya merece el desplazamiento, no se puede olvidar que se trata de un emplazamiento estratégico que sirve cómo puerta de acceso a numerosas rutas de senderismo de diferente dificultad en la Sierra del Sueve. Este espacio protegido es la cadena montañosa más cercana a la costa de Asturias y en él se alcanzan alturas considerables cómo los 1.161m del Pico Pienzu a escasos kilómetros de la playa.
Se trata de un lugar ideal para descubrir la riqueza forestal de este territorio con bosques milenarios como la Tejeda del Sueve o el sorprendente Hayedo de la Viescona situado a poco más de 200m sobre el nivel del mar, inhabitual en esta especie, en torno al arroyo de la Toya.
En el Sueve también podemos avistar corzos, jabalís, buitres o incluso gamos, especie no autóctona introducida en 1960. Destaca también la presencia de asturcones, la raza de caballo local que habita en esta sierra desde sus orígenes como especie y hoy, en estado semi salvaje, se encarga del mantenimiento natural de la vegetación.
El Mirador del Fitu es, en definitiva, una visita indispensable que puede ser acompañada de senderismo, avistamiento de fauna y flora o la visita de destinos cercanos de la costa cómo Lastres o el Museo del Jurásico (MUJA).